Nuestros pequeños, aunque no escogen nacer con una cardiopatía, luchan y se aferran a la vida por instinto. Por eso debemos hacer todo lo posible para ayudarles. Y sin duda, un diagnostico precoz es lo mejor que podemos hacer por ellos.
Hoy comienza una semana de concienciación, qué culmina el 14 de febrero con el día mundial de las cardiopatías congénitas. Aquí os dejo algunos datos importantes:
- ¡4000 casos nuevos cada año! En España ocho de cada mil niños nacen con esta patología congénita.
- Una cardiopatía es una malformación del corazón o de los grandes vasos sanguíneos. Existen más de 50 tipos de malformaciones y a veces se combinan varias en el mismo cuerpecito.
- La mayoría son leves y se controlan con revisiones periódicas. Otras se solucionan con cateterismos. Pero las más graves implican largas estancias en los hospitales e intervenciones quirúrgicas periódicas, que a veces se prolongan hasta la vida de adulto.
- Por suerte, el 90% de los afectados por cardiopatías congénitas llegan a adultos frente al 20-25% que lo hacía en los años 50. Esto ha sido posible gracias a los avances en el diagnóstico prenatal y en las intervenciones quirúrgicas.
Mis deseos para este año 2018 son simples: que se siga investigando y que la sociedad se vuelva más comprensiva y empática. Qué no tengamos que oír frases tan deshumanizadas como “Eres ideal para el puesto, pero que tu hija tenga una cardiopatía me supone un problema.”
Gracias a todos por compartir.